Introducción
La traducción en farmacovigilancia requiere rapidez y precisión. Cuando se manejan reportes de reacciones adversas, cualquier pérdida o ambigüedad puede afectar la seguridad del paciente y la investigación. Este artículo ofrece pasos prácticos para asegurar reportes fieles, consistentes y útiles para equipos de seguridad de medicamentos.
Prioridades: rapidez sin sacrificar exactitud
- Tiempo: los reportes deben traducirse con celeridad para cumplir plazos regulatorios.
- Precisión: mantener el significado clínico exacto, especialmente en síntomas, dosis y cronología.
- Trazabilidad: documentar cambios y responsables para auditorías.
Terminología estandarizada y recursos indispensables
- Glosario validado: crea un glosario central con términos clave (reacción, severidad, desenlace).
- Listas de equivalencias: unidades, abreviaturas y nombres de principios activos.
- Memoria de traducción: conserva segmentos aprobados para coherencia entre reportes.
Flujo recomendado para traducir reportes de reacciones adversas
- Recepción y priorización: marcar reportes urgentes (gravedad, hospitalización).
- Protección de datos: anonimizar identificadores personales antes de compartir con terceros.
- Traducción especializada: traductor con experiencia en farmacovigilancia y terminología clínica.
- Revisión técnica rápida: revisión por experto clínico o farmacovigilancia para validar términos críticos.
- Control de calidad focalizado: comprobaciones automáticas y manuales en cifras, fechas y unidades.
- Entrega y registro: incluir metadatos (versión, traductor, fecha) y almacenar en repositorio seguro.
Cómo evitar pérdidas de información crítica
- No resumir ni eliminar detalles clínicos en la traducción.
- Mantener descripciones textuales de eventos tal como constan en la fuente.
- Marcar dudas con comentarios y escalarlas al equipo clínico.
- Usar formatos estructurados (campos obligatorios) que eviten omisiones.
KPIs sugeridos
- Tiempo medio de entrega para reportes críticos (horas).
- % de coincidencia con glosario aprobado.
- Número de consultas/clarificaciones por reporte.
- Errores críticos detectados en QA por 1.000 palabras.
Buenas prácticas de seguridad y cumplimiento
- Firmar acuerdos de confidencialidad y protección de datos.
- Cifrar transferencias y controlar accesos por rol.
- Mantener logs para auditoría.
Conclusión
La traducción en farmacovigilancia debe combinar rapidez, terminología estandarizada y controles que eviten pérdidas de información crítica. En SumaLatam ofrecemos evaluación de procesos, creación de glosarios y auditoría de traducciones para proyectos de farmacovigilancia. Contactanos para una revisión de tu flujo y una propuesta a medida.




